La cotización del petróleo venezolano
promedió 99,49 dólares por barril durante 2013, lo que generó ingresos
cercanos a los $40 millardos para la nación suramericana, pero a pesar
de esto el país está sumido en una crisis económica marcada por un
endeudamiento desbordado, alta inflación y una escasez de bienes básicos
disparada.
En los últimos 15 años, los ingresos por
la venta de petróleo ascienden a $972,5 millardos, pero las
estadísticas oficiales registran que la deuda del Gobierno central y de
la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) cerró en 158,5 millardos de
dólares en 2013, cuando en 1999 era cercana a los $30 millardos. Además,
economistas calculan que el déficit fiscal fue alrededor de 15% del
Producto Interno Bruto (PIB), cuando países europeos en crisis no
alcanzaron más de 9%. Gustavo Rojas, director de la firma Polinomics,
sostuvo que el problema es que Venezuela gasta más de lo que tiene.
Además, si bien el petróleo se cotiza en niveles aceptables, hay
acuerdos como Petrocaribe y el Fondo Chino, en los que Venezuela deja de
percibir ingresos por 400.000 barriles diarios, casi 15% de la
producción de crudo de Venezuela. En consecuencia, Pdvsa enfrenta
dificultades para sostener su flujo de caja. Rojas esperaba que la
devaluación sirviera para ingresar más bolívares y así la empresa
gubernamental no se viera obligada a acudir al Banco Central de
Venezuela (BCV) por financiamiento. La entrada en vigencia del Sistema
Cambiario Alternativo de Divisas (Sicad II), un nuevo mecanismo con
mayor libertad en medio de un rígido control cambiario que opera desde
el año 2003, producirá un ingreso adicional de Bs 460 mil millones para
el Ejecutivo en 2014, lo que representa 12 puntos del PIB, que ayudarían
a aliviar las finanzas, según cálculos de Pedro Palma, director de la
firma Metroeconómica. El economista Pedro Palma sostuvo que el año
perfilaba con un déficit fiscal hasta de 18% del PIB, pero ahora Pdvsa
tendrá la oportunidad de vender divisas a través de un nuevo esquema a
un tipo de cambio más alto (pasa de Bs 6,30 a Bs 50, aproximadamente),
lo cual generaría un ingreso adicional de bolívares.
Altos precios y anaqueles vacios. Pero
el endeudamiento no es la única bestia negra que enfrenta la economía
venezolana. La inflación cerró el año pasado en 56,2%, la más alta del
mundo, mientras que la última cifra conocida sobre la escasez general de
bienes y servicios remite a enero cuando fue de 28%. Solucionar esto
pasa por controlar el gasto público. Entre marzo de 2013 y 2014, la
liquidez monetaria creció 75%, generando una mayor cantidad de bolívares
en el mercado y presiones sobre el precio del dólar y de los bienes y
servicios, según Rojas.
Por el piso. La otra distorsión
económica reside en la caída de las reservas internacionales, que
estaban en $30.332 millones en 2010 y pasaron a $21.841 millones al
cierre de 2013, un descenso de 29,1%. Según Palma, la caída obedece a
que desde que el Gobierno creó el Fondo Nacional para el Desarrollo
Nacional (Fonden) en julio de 2005, el BCV ha desembolsado 120 millardos
de dólares por concepto de ingresos petroleros, que otrora habrían
forma parte de las reservas. “Las reservas liquidas apenas oscilan entre
$1.200 y 1.500 millones, lo que equivale a 15 días de importaciones,
aproximadamente”, dijo Palma.
Cuatro tasas. Completa la cuenta
los tres ajustes cambiarios en el último año, resultando en un país con
cuatro tasas, tres de ellas oficiales. La plataforma se resume así:
dólar oficial en Bs 6,30; Sicad I con una tasa de Bs 10 según resultó de
la última subasta semanal; Sicad II con una tasa de Bs 50 por billete
verde en promedio; y el mercado paralelo que registra un cambio superior
a los Bs 60. Aunque el Ejecutivo ha planteado que 80% de las
importaciones se manejarán por el Centro Nacional de Comercio Exterior
(Cencoex) –antiguo Cadivi-, a Bs 6,30 por dólar, en realidad será cerca
de 55%, según estimaciones de Asdrúbal Oliveros, director de
Ecoanalítica, pues el organismo venía de mover $28,9 millardos y pasará a
$12 millardos, mientras que el mecanismo de subasta de divisas subirá
de $2,4 millardos a $7,4 millardos con un tipo de cambio de Bs 14.
Oliveros prevé entonces una devaluación de 82,7% para las importaciones
públicas (el Estado tiene acceso a dólares preferenciales) y de 138,4%
para las privadas durante este año, que tendrá un dólar cercano a los Bs
35. Está por conocerse si la crisis que afronta Venezuela tendrá
solución con la “nueva ofensiva económica”, planteada por el presidente
Nicolás Maduro, que consta de tres componentes: aumento de la
producción, abastecimiento pleno y precios justos para los consumidores,
los cuales forman parte de un plan de fiscalizaciones que se aplicó por
primera vez entre noviembre y diciembre de 2013 y se concentró en
tiendas de electrodomésticos, ropa y autopartes, causando un bajón de
los inventarios en estas áreas.
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